Somos jóvenes, todavía unos niños.

Todavía tenemos un camino largo, el peso de la madurez.

Hay tantas cosas que no se pueden hacer si no es ahora.

Libérate de la verja y camina libremente.

No me toquéis, tíos.

A mi edad, con mi potencial en su punto más alto,

lo desconocido hace la vida divertida.

Tengo la enfermedad de segundo: la pubertad.

Nos encanta; venid, venid aquí.

A diferencia de cómo es el mundo normalmente

podemos ver muchísimas estrellas en el cielo.

No lo sabes.

No lo entiendes.

Anhelo la libertad.

Puede que sea un niño todavía, o a lo mejor un perro.

Las cosas bonitas pasan rápido, sigue la corriente.

Puede que todavía sea un niño,

o a lo mejor un perro.

El viento sopla, sopla, sopla.

Sopla, silba, viento, viento.

Todo lo que necesitamos es libertad,

no amor, amor, amor.

Siguiendo el retorcido sistema,

encontrar la razón para vivir es más difícil que vivir.

Puede que no puedas hacer lo que quieras.

He llegado hasta aquí haciendo lo que odio.

Ni se te ocurra pararme.

No digas que los errores son cosa de la juventud.

Las calles de noche están preciosas.

Cometo errores, así que abrázame, por favor, con la excusa de la juventud.

Nos encanta; venid, venid aquí.

A diferencia de cómo es el mundo normalmente

podemos ver muchísimas estrellas en el cielo.

No lo sabes.

No lo entiendes.

Anhelo la libertad.

Puede que sea un niño todavía, o a lo mejor un perro.

Las cosas bonitas pasan rápido, sigue la corriente.

Puede que todavía sea un niño,

o a lo mejor un perro.

El viento sopla, sopla, sopla.

Sopla, silba, viento, viento.

Todo lo que necesitamos es libertad,

no amor, amor, amor.

No te metas conmigo, quiero morir viviendo así.

Será un desperdicio, pero la vida larga, es corta.

No me encierres,

eso no me hará quererte.

No te rías, tú también vas a cambiar.

 El viento sopla, sopla, sopla.

Sopla, silba, viento, viento.

Todo lo que necesitamos es libertad,

no amor, amor, amor.