No necesito cosas como recuerdos.

Quiero dormir en la eternidad.

Ni siquiera me importa

si el sol no vuelve a amanecer.

En mis sueños

siempre sonríes.

¿Por qué? Oh, ¿por qué?

¿Por qué no te limitas a desaparecer...?

Te lo di todo.

¿Me diste algo?

Seguramente, para siempre

tú serás mi todo,

todavía mi todo.

Sigo amándote

como la nieve caída

en medio del verano.

Un milagro efímero.

Si no te hubiese conocido

no me sentiría tal miseria

que me oprime el corazón

con semejante agonía...

Pero aun así,

si no hubiese estado destinada a conocerte

no sabría nada

sobre la fuerza y la amabilidad.

No veo nada

y simplemente, lloro en una esquina de mi habitación.

No necesito cosas como estaciones.

Quiero tocar la nada.

No importa si acabo olvidando

el nombre de esa flor,

pero en mis sueños

siempre sonríes

incluso ahora, así que, todavía...

Te lo dí todo.

¿Me diste algo?

Sin cambiar jamás, para siempre,

eres mi todo.

Sigo esperando.

¿Puedo seguir amándote?

Como una flor floreciendo

en medio del invierno,

ahora eres mis meros recuerdos efímeros.

Si no te hubiese conocido no sentiría tal soledad por las noches

que hace que mis lágrimas no dejen de fluir sin cesar...

Pero aun así, todo lo que quiero dedicarte es:

"todavía te amo".

Mis sentimientos siguen siendo los mismos

que los de la noche

en la que me abrazaste

y en la que pude reír por primera vez.

Si tan sólo uno de mis deseos

se hiciera realidad,

una vez más, desearía sentir tu tacto,

bañado bajo el sol matutino

y sentirme agradecida de haber nacido en este mundo.

Si no te hubiese conocido

no me sentiría tal miseria

que me oprime el corazón

con semejante agonía...

Pero aun así,

si no hubiese estado destinada a conocerte

no sabría nada

sobre la fuerza y la amabilidad.

Si cierro los ojos, 

espero que estés cerca de mí, a mi lado.

Incluso ahora si ciero los ojos

espero que siempre estés a mi lado.