¿Me rescatarías? ¿Me cubrirías? 

¿Me cogerías el teléfono cuando empezase a romperme?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?

¿Me rescatarías cuando estuviera solo?

¿Cuando necesitase tu amor? ¿Tu ayuda?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?

Ya no hablamos mucho, ya no. 

Botellas rotas y portazos,

pero nos seguimos queriendo.

Sí, nos queremos.

Sé que la vida nos ha separado,

pero todavía soñamos con los viejos tiempos.

Cuando nos cuidábamos,

vivíamos por el otro.

Pero me empiezo a pregunar

si estoy perdiendo el sentido...

¿Me rescatarías? ¿Me cubrirías? 

¿Me cogerías el teléfono cuando empezase a romperme?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?

¿Me rescatarías cuando estuviera solo?

¿Cuando necesitase tu amor? ¿Tu ayuda?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?

Sí, echo de menos nuestros momentos.

No se puede olvidar lo que no puedes recuperar

ni reemplazar.

Tío, el tiempo no es tu amante.

Me da igual lo que creas,

si me llamas voy a estar ahí.

Ni se te ocurra llamar a otro,

no hace falta.

Y empiezo a pregunarme

si estaré perdiendo el sentido...

¿Me rescatarías? ¿Me cubrirías? 

¿Me cogerías el teléfono cuando empezase a romperme?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?

¿Me rescatarías cuando estuviera solo?

¿Cuando necesitase tu amor? ¿Tu ayuda?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?

¿Me rescatarías? ¿Me cubrirías? 

¿Me cogerías el teléfono cuando empezase a romperme?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?

¿Me rescatarías cuando estuviera solo?

¿Cuando necesitase tu amor? ¿Tu ayuda?

¿Me rescatarías? Ah, ¿me rescatarías?